Terence McKenna es uno de los personajes mas apasionantes y aparentemente desconocidos del siglo XX. Estudió ecología, conservación de recursos y chamanismo en Berkeley y fue en este último apartado en el que mas se centró, convirtiéndose en el gurú de las plantas enteógenas o psicodélicas . Un complemento con entidad propia del gurú del LSD Timothy Leary en esa bendita California de los 70s.
McKenna se centró sobretodo en el estudio de sustancias como la Ayahuasca y plantas como las setas alucinógenas (Psylocibina) sobre la que escribió un manual de cultivo con su hermano Dennis bajo sendos apodos. Siempre estuvo a favor de la libertad del individuo para explorar su conciencia y mente, aunque siempre instó a hacerlo con respeto hacía las sustancias y plantas por el gran poder que tienen, al ser, tal como él mismo decía muchas veces "carne de los dioses" y permitir una conexión con partes de la realidad que a menudo se nos escapan en el día a día.
De todas formas, el legado de McKenna no trata solo sobre drogas psicodélicas, si no mas bien acerca de la figura del chamán y la relación que este establece con el "otro lado" y su función social a la hora de traer la información relevante de vuelta a "este lado". Es considerado un pensador, un filosofo y un visionario. Youtube está lleno de vídeos con sus reflexiones y en Googlevideo hasta podéis encontrar charlas enteras de este hombre, que ya solo por su forma de hablar, tiene cierto poder relajante e hipnótico. Seguiremos hablando de él, pero lo mejor es que disfrutéis de su reflexión de dos minutos (arriba) acerca de como la cultura popular es la mejor forma de uniformizar a la gente para que sea mas fácil venderle productos y convencerle de ideas locas...aunque él, sin duda, lo cuenta mucho mejor que yo.
1 comentarios:
Su voz es algo imposible de escuchar sin identificarla...:)
Culture,
is not your frieeeend!
¿Y cómo nos defendemos? Creando arte!
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